El suelo está formado por partículas, se trate de suelos granulares o finos, todos cumplen con esta verdad y entenderla es clave para interpretar los fenómenos que ocurren cuando se trabaja o construye con, sobre o dentro de el.
El suelo está formado por partículas sólidas de distinto origen y tamaño. Estas partículas, dependiendo de su historia, se organizan dejando espacios entre ellas, a los que llamamos: vacíos. Los vacíos, son una parte fundamental del suelo y siempre están llenos de algún fluido (aire, agua, CO2, petróleo, etc.)
Las propiedades índice son un conjunto de relaciones matemáticas que nos ayudan a representar fenómenos físicos que ocurren en el suelo. Estas relaciones no son exclusivas de los suelos, un grupo de ellas también se aplica a las rocas y a otros materiales particulados.
Se pueden encontrar muchas relaciones entre las masas, volúmenes o una mezcla de ellas, tanto de los sólidos, como de los vacíos o de ambos, en el suelo.
Entre las más utilizadas tenemos:
Una forma gráfica de mostrar las propiedades índice es mediante un diagrama de fases del suelo (como el del vídeo). Se selecciona una porción de suelo y se subdivide en sólidos y vacíos, los vacíos a su vez se subdividen en fluidos y gases. Por la izquierda se esquematizan los volúmenes de estas porción de suelo y por la derecha las masas (o pesos). Conociendo algunas de las cantidades que confirman el suelo se pueden obtener las otras. Muchas veces se opta por considerar una volumen total unitario o un volumen de sólidos unitarios, esto simplifica la resolución de problemas.
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